Así son las redes sociales. Cuando te llega una petición de amistad te hace ilusión, piensas quien podrá ser (o al menos eso me sucede a mi), luego la abres y piensas "¿Quién demonios eres?" Pero bueno, gracias a eso yo he conocido a gente que nunca me habría parado a pensar que existían o que pudiera tener una relación de amistad o lo que sea.
¿Buena o mala esta situación? Pues depende.
No hay comentarios:
Publicar un comentario